Los trabajos sucios suelen ser rechazados por algunas personas, quienes no están dispuestas a enfrentarse a malos olores o situaciones incómodas como ver un cadáver. El trabajo más sucio del mundo involucra no solo tener malos olores alrededor, sino también estar expuesto a enfermedades.
Trabajos más pagados: perforador de pozos
Los perforadores de pozos petroleros son personas que se encargan de manejar máquinas para llevar a cabo la perforación y obtener el petróleo. Estos trabajadores están expuestos constantemente a los residuos del producto, así como a la tierra y agentes externos, por lo que siempre suelen ensuciarse. El salario promedio es 140.000 dólares anuales. Para poder trabajar en los yacimientos, se debe estudiar ingeniería del petróleo.
Empleos muy bien pagados: ser podólogo
Los podólogos son los especialistas de la salud que se encargan de curar las afecciones de los pies. Por ese motivo, el podólogo debe enfrentarse diariamente con hongos en las uñas, pie de atleta, uñas encarnadas y mal olor en los pies. Todas esas condiciones hacen que el trabajo entre en la categoría de trabajo sucio, debido a que cualquier persona no está dispuesta a realizarlo. El sueldo promedio del podólogo es de 177.000 dólares al año. Para ser podólogo es necesario estudiar medicina podiátrica.
Trabajos sucios bien pagados: operadores de vertederos
Los operadores de vertederos, al igual que los recolectores, deben estar en contacto con residuos de basura, además de eliminar y recolectar el gas metano que se forma en los vertederos. Por esa razón, este empleo también entra en la categoría de los trabajos sucios del mundo. El salario anual aproximado de un operador de vertedero es de unos 100.000 dólares. Para ser operador de vertederos se debe hacer un curso especial.
Limpiador de escenas de crimen: trabajo sucio
Los limpiadores de las escenas del crimen se encargan de limpiar la zona luego de que la investigación del caso terminó. No solo incluye retirar lo que está localizado en un sitio, sino también los residuos que se esparcen por toda la escena donde ocurrió el delito.
Las personas que ejecutan este trabajo ganan un sueldo aproximado de 75.000 dólares cada año y tienen horarios de trabajo flexibles. Para poder laborar en esta profesión, es necesario hacer cursos especializados en criminalística.
El trabajo más sucio del mundo: recolector de basura
La recolección de basura es un trabajo sucio, pero alguien tiene que hacerlo. Las personas que realizan esta labor deben recoger residuos que están descompuestos, como alimentos o también desechos como los pañales o las toallas sanitarias.
Además de estar en contacto con la basura, los recolectores también deben enfrentarse a las condiciones climáticas, debido a que trabajan bajo la lluvia, la nieve, el granizo y se exponen a temperaturas muy calientes. Estos empleados perciben un salario anual de
60.000. Para este trabajo, se debe hacer un curso especial para conocer todas las normas y peligros ante los que se expone la persona que lo va a ejecutar.
Empleos de limpieza bien pagados: limpiador de baños portátiles
Los limpiadores de baños portátiles se encargan de limpiar y desinfectar estos equipos para que puedan ser usados nuevamente. Diariamente, las personas que ejecutan esta labor, se encuentran con excremento y orina, lo que lo convierte en un trabajo sucio, pero alguien tiene que hacerlo. Se estima que estos empleados pueden limpiar alrededor de 50 y 60 baños al día. El sueldo promedio de esta profesión es de 60.000 dólares al año. Para este empleo solo se requieren conocimientos de limpieza y acatar las instrucciones de los supervisores.
Embalsamador
El embalsamador es la persona encargada de preparar al difunto para el funeral y la extremaunción. Para ello, es necesario reemplazar la sangre con el líquido de embalsamamiento y también maquillar al cadáver en el caso de que sea necesario. Este trabajo no solo es considerado como sucio, sino también peligroso, debido a que las personas están expuestas a enfermedades e infecciones. El salario anual aproximado de un embalsamador es de 60.000. Para poder trabajar en esta área, es necesario hacer cursos especializados para aprender a preparar los cuerpos.
Manos sucias de un hombre dedicado: el minero
Los mineros de carbón se exponen constantemente a los residuos de este mineral, por lo que todo el tiempo están sucios. Por otra parte, hay que mencionar que estos trabajadores también se enfrentan a explosiones por la presencia del metano en la zona. Ser minero es un trabajo sucio y peligroso; sin embargo, es recompensado con un sueldo aproximado de 64.000 dólares al año. Para poder laborar en esta área en necesario especializarse en la minería.
Manos sucias y dinero limpio: plomero
Los plomeros no solo reparan grifos y tubos con fugas, sino que también están expuestos a las bacterias y aguas residuales, por lo que entra en la categoría de trabajos sucios en el mundo. A pesar de ser una profesión que implica ensuciarse constantemente, la persona que la ejecuta puede percibir anualmente un aproximado de 60.000. Para ser plomero es necesario hacer un curso sobre materia, con el objetivo de poder reparar todas las fallas de la mejor manera posible.
Trabajos sucios: inspector de aguas residuales
Los inspectores de aguas residuales tienen la tarea de hallar grietas y fugas en los sistemas de alcantarillado subterráneo. Este trabajo involucra toparse con excrementos humanos, desechos tóxicos, cadáveres de animales y personas, además de microorganismos que son peligrosos y exponen la vida del empleado. El sueldo promedio de inspector de aguas residuales es de 50.000 dólares al año aproximadamente. Para poder laborar en el área es necesario hacer un curso especializado.
Se puede resumir que los trabajos sucios son bien pagados, debido a que cualquier persona no está dispuesta a hacerlo. Un ejemplo de ello puede ser un trabajo sucio en hospital, como el que realizan los gastroenterólogos cuando tienen que hacer un examen en donde están en contacto con las heces del paciente. Asimismo, hay que señalar que el trabajo más sucio del mundo es todo aquel que implique el contacto con la sangre o los desechos en descomposición.