Actualmente vivimos en un mundo en el cual las zonas verdes van desapareciendo poco a poco. Aquellos bosques que normalmente podíamos ver, están siendo reemplazados por casas y edificios.
Sin embargo, cada día surgen nuevas ideas que buscan aumentar la recuperación de estas zonas en muchas ciudades, para que todos sus habitantes puedan respirar aire puro y estar más cómodos.
En muchas poblaciones se han construido autopista inmensas y largos puentes con la intención de mejorar el tráfico en horas punta, pero ¿dónde están ahora los emplazamientos naturales?
Grandes parques bajo las autopistas de Boston
Boston es una ciudad bastante conocida por las grandes extensiones de asfalto que tiene, y nunca nadie le había dado importancia a todo el espacio que existe bajo estas construcciones.
Sin embargo, surgió una propuesta por parte del Departamento de Transporte y Desarrollo Nacional de Massachusetts, con la que se proponen aprovechar todo el espacio disponible y sacarle el máximo provecho.
Esta nueva idea urbanística se basa en agregar a algunos de estos espacios inutilizados elementos para crear un gran parque, que una la calle Albany junto al Canal Fort Point, ambos puntos de encuentro muy populares en la ciudad.
La finalidad de todo esto es que este parque tenga la capacidad de conectar South End a South Boston, aportando vegetación a esta urbe, hoy excesivamente industrializada.
Hoteles, pasarelas y parques exclusivos para animales
Este plan no solo consiste en transformar estas zonas bajo las autopistas en parques naturales. El despliegue también contempla la construcción de un estacionamiento para bicicletas y vehículos con una capacidad de 175 plazas para automóviles.
Por si fuera poco, el proyecto incluye, además, la construcción de un hotel. Éste va a contar con más de 200 habitaciones y ha sido bautizado con el nombre de Marriot. Es una de las grandes propuestas de este plan para suavizar el impacto del asfalto en la vida de los bostonianos.
Las mascotas también están incluidas en esta nueva empresa. Crearán parques exclusivos para ellas, donde sus dueños podrán comprar comida y bebidas para pasar el rato mientras sus animales de compañía juegan.
Todos los involucrados están volcados en dar el mejor uso posible a estos espacios desperdiciados, para intentar enmendar el daño infligido al terreno durante décadas de capitalismo.
En esta ciudad el asfalto ya nunca será una limitación para la diversión.