En internet se puede conseguir de todo: ropa, zapatos, amigos, aprender a hacer cosas nuevas y hasta comprar medicamentos de manera cómoda, legal y rápida.
Desde la llegada de la web 2.0, los empresarios vieron en el mundo digital una oportunidad para llegar a nuevos clientes. De esa manera, poco a poco se incorporaron nuevos comercios. Los últimos negocios en apuntarse a esta tendencia han sido las farmacias, que han irrumpido con fuerza en el mundo del ecommerce .
En ese sentido, conseguir medicamentos a través de la web es una gran ventaja. No obstante, hacer que esto fuera posible ha llevado cierto tiempo, dada la inicial imposibilidad legal de vender fármacos en el ciberespacio.
Afortunadamente las leyes se adaptan a los nuevos tiempos y hoy en día ya es posible encontrar exitosas farmacias en el mundo digital que comercializan medicinas las 24 horas del día. Eso sí, solo es posible adquirir aquellos sin receta médica, lo cual viene a ser una nimiedad si se considera el resto de las ventajas.
Ventajas difíciles de ignorar
Visto este ejemplo, no es difícil imaginar por qué las farmacias han conquistado la venta online tan rápido. Y si bien existen algunas barreras, como que solo pueden vender medicamentos sin receta, existen ventajas bien claras que explicaremos a continuación:
En primer lugar, desde su creación, las farmacias online han destacado por ofrecer mejores precios por una razón muy sencilla: los establecimientos digitales cuentan con muchos menos gastos, lo que repercute en los precios de los productos.
En otras palabras, las farmacias digitales ahorran más en administración, por lo que las medicinas que ofrecen en sus páginas web suelen ser mucho más baratas.
En segundo lugar, hablando de las ventajas de las farmacias digitales, no se puede dejar de mencionar que este tipo de negocio, al igual que otros en el mundo digital, tiene acuerdos con empresas de mensajería y reparto que se encargan de que las medicinas y productos adquiridos por los clientes lleguen a donde estos estén en un corto plazo de tiempo.
Finalmente, en tercer lugar, las farmacias online destacan por su discreción. En ese sentido, nadie se tiene que enterar de cuántos preservativos usas, o qué tratamiento sigues.
El auge del ecommerce farmacéutico
Ciertamente, las farmacias son uno de los últimos negocios en incorporarse a la ola digital, pero, desde que la ley cambió, su auge ha sido difícil de ignorar.
Un gran número de personas que no tenían la posibilidad de visitar una farmacia por la zona en que vivían, así como personas con impedimentos físicos o psicológicos, han sido algunos de los principales beneficiados tras el cambio de la ley.
El cambio de legislación, aunque tardío, ha sido un gran avance para permitir que cientos de ciudadanos tengan acceso a medicinas y otros artículos de primera necesidad, aspecto nada desdeñable que ratifica, una vez más, que internet está en todo y que los negocios que no se sumen a la ola probablemente estén condenados a desaparecer.