Si eres aficionado a los dulces o si no consigues dormir las 8 horas completas que los especialistas recomiendan, entonces tal vez te pueda interesar la más reciente investigación que se ha llevado a cabo en el King’s College de Londres.
El estudio realizado afirma que mantener hábitos saludables de sueño puede contribuir a perder peso y a consumir menos cantidad de azúcar al día siguiente.
Los investigadores desarrollaron un experimento con un grupo de 20 voluntarios que dormían a diario un promedio de 6 horas, o menos. Al aceptar formar parte del estudio, los participantes siguieron un curso para adquirir nuevos hábitos para el descanso.
En este punto se les enseñaron diversas tácticas, como no tomar cafeína después de media tarde, no irse a dormir demasiado llenos, ni con hambre. El resultado fue que, desde entonces, los voluntarios comenzaron a dormir un mínimo de 7 horas cada día.
Lo que más llamó la atención de los profesores es que todos los participantes comenzaron a consumir hasta 10 gramos menos de azúcar diariamente. La reducción en el consumo de carbohidratos también fue evidente.
Al realizar la comparación con el grupo de voluntarios que no hizo el curso, se determinó que no aumentaron sus horas de sueño nocturno, ni tampoco redujeron la cantidad de alimentos dulces que consumían a diario.
Debate de hipótesis
El resultado de la investigación abrió la compuerta para todo tipo de hipótesis, que aún se siguen debatiendo en el centro de estudios.
Sin embargo, los científicos sospechan que la falta de sueño en el organismo provoca que el cerebro desarrolle una especie de “hambre de dulce”, con lo que se activan los mecanismos de recompensa para nivelar el estrés y la ansiedad que genera el no dormir.
Los expertos aún no descartan otras hipótesis. Otra teoría es que la alteración de los ritmos circadianos, la cual se produce debido al insomnio, afecte a los mecanismos del cuerpo humano para regular el apetito.
En todo caso, el estudio sirvió para demostrar que cuanto menos tiempo descanse el organismo, este se mantendrá activo para el consumo de alimentos, especialmente los dulces. Tal vez esta sea la razón de los antojos por chocolate o tarta que experimentan miles de personas cada día.